Alba Frechilla y María Negro: “La cultura está en minúsculas en Times New Romans a tamaño 8. Se necesita subrayar, poner en negrita y bien grande”

Foto: Obra NO ES OTRO ESTÚPIDO ESPECTÁCULO ROMÁNTICO

Alba Frechilla y María Negro son las dos mujeres que forman Valquiria Teatro, compañía creada en el año 2010 por varias profesionales de las artes escénicas que se formaron en Castilla y León, más concretamente en Valladolid.

Valquiria Teatro comenzó con 6 productorxs pero ahora se han quedado sólo ellas dos. Juntas forman el tándem perfecto para contar historias que enganchen y hagan al público pensar. Hemos hablado con ellas de lo difícil que es ser las nuevas en un sector como el teatro en Valladolid, de la importancia de la cultura y la educación cultural.

Antes de nada muchas gracias a  las dos por hacernos un hueco para atendernos. Vamos a empezar por el principio. ¿Cómo acabasteis ambas en un proyecto como este?

Alba Frechilla: Como empiezan todos los buenos proyectos, con la pregunta: ¿Por qué no hacemos algo no? Eso fue, esa necesidad de salir de la escuela y querer hacer.

Es una compañía que se creó en época de crisis, y que culturalmente en Valladolid en concreto, pues estaba bastante verde todo y complicado, así que bueno pues decidimos crear nosotros algo.

María Negro: Claro, como era complicado en ese momento que las compañías nos contrataran pues decidimos montar algo. También fue un poco por contar nuestras historias, porque al final nosotras salíamos de la escuela con unos intereses y qué mejor que juntarte con la gente que conoces, con la que has trabajado esos años de escuela para hacer un proyecto en común.

¿Cómo fueron esos primeros momentos de Valquiria Teatro?

María Negro: De aprendizaje puro y duro. Ensayo error, nunca mejor dicho. Lo primero que montamos fue ‘El Premio del Bien Hablar’, Lope de Vega, que ahí éramos 9 actores en escena más todo el equipo que había detrás que éramos casi tantos como los que estábamos en escena.

Comenzamos Valquiria Teatro con 6 productores, pero bueno luego era un proyecto con muchas ganas, pero económicamente era complicado de sostener y vivir de ello. Por eso la gente fue encontrando otras cosas. Ahora mismo, Valquiria Teatro podemos decir que lo formamos nosotras dos que somos las productoras, actrices, en resumen lo hacemos todo.

Alba Frechilla: Lo que pasa que bueno éramos la primera promoción, la primera compañía que se creaba de la escuela y tuvimos mucho apoyo.

Al tener a Carlos Martínez-Abarca que era profesor, también a Jon López Garnica que era el coreógrafo, Juan Merino para lucha escénica, es decir, hicimos ahí un montaje muy grande con un buen equipo, pero claro insostenible para la época en la que estábamos.

María Negro: Totalmente, fíjate de 9 actores y ahora somos 4, 2, una cosita así.

Alba Frechilla: Ahora mismo, siempre contamos con más gente en todas las producciones. No somos nosotras solas sino que tenemos un director, un autor, un técnico, y ahora con los últimos espectáculos que tenemos música en directo pues contamos con músicos. Siempre nos intentamos arropar de gente y de profesionales que trabajen y que quieran contar historias como nosotras.

María Negro: Y hablando de profesionales en Valquiria Teatro hemos contado con Alberto Conejero, conocidísimo y galardonado con los Premios Max en 2016 por su obra ‘La Piedra Oscura’, como autor de las dos primeras obras el autor era en Valquiria Teatro.

Ahora como autor en los últimos montajes hemos contado con Chema Trujillo, autor extremeño con el que hemos conectado muy bien con las cosas que queremos contar. Además, tenemos el lujo de contar con el director Carlos Martínez-Abarca, que fue nuestro profesor en la escuela y que para nosotras es un auténtico lujo poder tenerlo como director de los montajes grandes que hemos hecho ya que trabaja en Madrid con profesionales como Blanca Portillo o  José Carlos Plaza y en propuestas muy diferentes.

¿Creéis que los habéis conseguido todo lo que en un inicio querías conseguir con Valquiria Teatro?

María Negro: Llevamos poquitos años, vamos bien. Pero llegar no hemos llegado porque hay mucho que contar, muchos proyectos por hacer, y muchas ganas de trabajar y de seguir aprendiendo, porque aquí no se termina de aprender.

Alba Frechilla: ( entre risas) Y muchos teatros que pisar.

Foto: Momento final del homenaje a Miguel Delibes y otros escritores vallisoletanos.

¿Qué sabéis ahora que no sabíais cuando empezasteis con la compañía, tanto a nivel Valquiria Teatro como a nivel individual?

Alba Frechilla: En la escuela te preparan para estar en el escenario, pero cuando sales de la escuela no puedes llamarte actor, sino que te vas haciendo poco a poco. En la escuela no te cuentan la letra pequeña. No te explican muchas cosas que vas aprendiendo cuando montas, como nosotras, una compañía.

Está claro que si estás de actor en un proyecto tienes otras partes y otro aprendizaje, pero al montar una compañía hay una gran parte de empresario que cuando estudias la carrera pues no cuentas con ella, y es una parte importante.

María Negro: Al montar una compañía aprendes que hay más cosas que actuar. Hay una parte de distribución, de comunicación… Aprendes a  sacar un proyecto desde la nada, es decir, desde que surge la idea, a tener ese guion, ir dándole forma, dar forma a la escenografía, al vestuario, a la iluminación, a la puesta en escena,…  Es crear todo. De todo esto esta claro que ahora sabemos mucho más que cuando empezamos.

¿Qué es lo que más satisfacción os da a la hora de terminar una obra?

María Negro: Sobre todo ver la reacción de la gente. Que el público disfrute y salga diciendo que les ha aportado algo, que se lleven algo para pensar. Eso para nosotras es importante. Tenemos la suerte que en nuestro último proyecto ‘No es otro estúpido espectáculo romántico’,  una obra muy divertida con música en directo basada en textos de José Zorrilla,  la gente sale del teatro feliz, con subidón. Esto para nosotras es genial porque es verdad que termina la obra y ver ese subidón en la gente es fantástico. Pero también en otros montajes cuando la gente sale no con esa felicidad pero con reflexión y como que han aprendido algo o han visto algo que les ha resultado interesante pues nos sentimos satisfechas.

Foto: SWEET HOME (AMAGENON)

Ambas sois las actrices de las obras de teatro, ¿Cómo trabajáis los personajes que realizáis? ¿Les ponéis algo de vosotras mismas en ellos?

Alba Frechilla: Siempre, todos los personajes tienen algo nuestro. Es que no puedes desvincularlo, no dejas de ser tú dejándole al personaje que hable a través de ti. Con algunos personajes discutes y a otros los amas pero son así y siempre tienen parte de ti.

María Negro: En el montaje de final de carrera que hicimos, ya nos decía David Ojeda, también profesor de la escuela, que estudiáramos los personajes desde el amor, que podía ser un personaje al que odiaras pero que no tienes que juzgarlo sino que hay que entenderlo. Y tiene toda la razón. Hay personajes, por ejemplo de una tragedia, que son personajes que de entrada piensas ¡Madre mía lo que han hecho! Pero hay que entenderles desde ese punto de amor para ver que te tienen que contar.

Alba Frechilla: Sí porque con todos los personajes al final todas las acciones las hemos justificado. Tú María cuando hiciste Medea o yo cuando he hecho Clitemnestra, y mira que era un personaje que había matado, engañado pero aun así la amas.

En todas las obras que he podido ver vuestras, sólo hay dos actrices (vosotras dos) ¿Es cómo crítica a la sociedad en la que vivimos?

Alba Frechilla: En realidad ha surgido así. La compañía somos ahora mismo dos mujeres trabajadoras, que amamos el teatro y la cultura. Y bueno perfectamente podría haber sido con un compañero, pero ha sido así.

María Negro: Eso es. Al final lo que queremos Alba y yo es contar historias que nos enganchen sean de hombres o sean de mujeres. De hecho, en algunos momentos hay que hacer de hombre pues lo hacemos.

Alba Frechilla: Por supuesto, en el último montaje hacemos de hombres, de mujeres y de lo que haga falta.

María Negro: Está claro que al ser mujeres hay cosas que queremos denunciar, ya que hay obras a las que al acercarnos ahora con la mirada del siglo XXI, como por ejemplo en la obra que estamos montando sobre José Zorrilla, que no compartimos porque está escrito en otro momento (en el siglo XIX) con una visión de ese siglo y que ahora dos mujeres como nosotras no podemos ver con los mismos ojos actos que se han visto normales que pueden aparecer. También decir que hemos realizado personajes femeninos maravillosos. Es la magia del teatro.

¿Creéis que en España y, más en concreto, en Castilla y León hay políticas e iniciativas públicas suficientes para potenciar la cultura, sobre todo desde el punto de vista de las mujeres?

María Negro: Hacen falta más.

Alba Frechilla: La cultura está en minúsculas en Times New Romans a tamaño 8. Se necesita subrayar, poner en negrita y bien grande.

María Negro: Para poder conseguir que aparezca la cultura en mayúsculas subrayada y en negrita hay que hacerlo desde los más pequeños. Hay que llevar a los niños al teatro, además de potenciarlo más en los pueblos y en las ciudades.

Alba Frechilla: Sobre lo que comenta María de educar a los niños en cultura, me gustaría comentaros una anécdota de hoy. Vamos a presentar una gala, del concierto ‘Miradas’ de la Orquesta Sinfónica de Castilla y León. Es un proyecto para que diferentes grupos escolares o colegios hablen sobre la integración, las diferentes culturas, la interculturalidad, para potenciar todo esto desde niños. Al hablar con ellos hemos visto que son felices porque tienen una hora a la semana música y que les ha tocado tocar la viola, otros querían tocar el piano pero les ha tocado la trompeta pero que siguen siendo felices. Viendo esto nos damos cuenta que a los niños sí les gusta la cultura, por lo que es una pena que no se les facilite más. Se necesita más cultura y más educación cultural porque si no nos vamos a volver unos borregos.

María Negro: Nos comentáis que hablemos desde el punto de vista de la mujer, pero desde el hombre también. Hace falta cultura en general y apoyo a las propuestas. Es verdad que a veces puedes llegar a decir que  en este proyecto hacen falta mujeres, porque al final falta visión femenina. A veces si que echo en falta historias de mujeres. Pero lo principal es que se necesita una apuesta por la cultura, que no lo pongan tan difícil.

Foto: espectáculo EN BLANCO

En la industria en la que os movéis, ¿os habéis encontrado con alguna barrera por el hecho de ser mujer? ¿Se ven diferencias entre la situación de España y la del extranjero en este aspecto? ¿Y respecto a Castilla y León con otras comunidades autónomas nacionales?

Alba Frechilla: Barreras nos hemos encontrado como compañía que emerge en una ciudad que siempre habían sido compañías consolidadas de hace tiempo.

María Negro: La gran barrera ha sido el darnos a conocer, que la gente diga sí Valquiria Teatro me suena, sé quién son.

Alba Frechilla: Pero no tiene nada que ver por ser mujer. María yo creo que nos hubiera pasado lo mismo si hubiésemos sido un chico y una chica o dos chicos que emprenden un proyecto nuevo en las fechas en las que lo hemos hecho nosotras. Si nos hemos encontrado problemas por ser  mujeres, yo no he sido consciente.

María Negro: Totalmente de acuerdo con Alba. Yo tampoco he sido consciente de tener más obstáculos por el hecho de ser mujer.

Alba Frechilla: Hombre yo no sé si igual en alguna entrevista que hayamos hecho o a algún programador haya tenido algún prejuicio porque hayamos sido mujeres, yo no he sido consciente.

María Negro: Nuestro caso es diferente a otros compañeros que viven sólo de la cultura. Nosotras además de ser actrices y de tener la compañía profesional, tenemos otro trabajo, por eso igual no vemos esas dificultades a que los que sólo viven de la cultura se enfrentan día a día.

Respecto a las diferencias con otras comunidades autónomas, nosotras estamos trabajando sobre todo aquí, en Castilla y León por lo que no te podemos dar esa perspectiva de otra gente que se está moviendo por otras comunidades.

¿En qué momento creéis que se encuentra el teatro en Castilla y León? ¿Está evolucionando favorablemente?

Alba Frechilla: Yo creo que ahora hay cambio.

María Negro: Hay ganas de crear y sobre todo hay una escuela de arte dramático de la que está saliendo gente.

Alba Frechilla: Sale gente, pero poca que se quede ya que ven poco futuro en Valladolid. La mayoría se van directamente dicen me voy a Madrid o me vuelvo a mi ciudad o me voy al extranjero.  Aquí la gente que sale lo ve un poco complicado, porque hay que currar mucho. Si nosotras no nos hubiésemos sentado ese día a formar Valquiria Teatro, seguramente ni María ni yo nos dedicaríamos a esto, estaríamos cada una en nuestra otra profesión y haríamos algo y nos apuntaríamos a cursos pero no profesionalmente, eso seguro.

María Negro: Es verdad que requiere mucho trabajo y mucha parte de distribución, de producción, de conocer un poco el sector, saber cómo se mueve, lo que son circuitos escénicos, lo que es la red de teatro…

Foto: Imagen del nuevo espectáculo de Valquiria Teatro, en el que hacen un homenaje a Miguel Delibes.

Y ya para terminar, ¿Cuáles han sido vuestros referentes dentro del teatro? ¿Nos recomendáis a alguna mujer que os guste especialmente dentro del mundo del teatro?

Alba Frechilla: (entre risas) Mi madre es mi referente, que va mucho al teatro y se necesita público. Ella lo ve todo y es la que me ha inculcado el que yo me dedique a esto.

María Negro: (continúan las risas) Público, las mujeres que son público es genial, es una reivindicación. Son referentes también. Y ya en los escenarios… Hay muchas grandes actrices.

Alba Frechilla: A mí Lucía Miranda del Teatro del Oprimido es una mujer que me encanta en el teatro como lo lleva, como se mueve, como no se le pone nada por delante y como cuida al público y a sus actores, la verdad es que es una mujer bandera.

María Negro: Ana de Teloncillo es una de las mujeres a destacar de Castilla y León para mí. Además es a la que iba a ver al teatro porque me llevaba mi tía, entonces es también como un referente de trabajo bien hecho, de tener alguien una compañía, de llevar muchos años y de hacer un trabajo para los niños muy cuidado, muy bonito y con mucho respeto a todo lo que conlleva la creación de un espectáculo. Cuida cada detalle y cuida mucho al público, porque aunque sean niños es un público muy exigente y los trata como tal.

Alba Frechilla: También está Mercedes Herrero de Palencia que hace teatro desde las entrañas, desde su día a día, desde su vida. Se desnuda en el escenario y la verdad es que es de admirar esa mujer.

También me gustaría mencionar a Lola Eiffel que me parece un buen referente con su último proyecto en el que está buscando la unión entre todos los bailarines de Castilla y Léon. Me parece una buena forma de potenciar que juntos podemos hacer algo, que se reivindicó, desde los compañeros actores y de los que nos dedicamos a esto, en el día mundial del teatro.

++info: http://valquiriateatro.com/

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